Muchos padres usan los golpes como método "correctivo" en los menores, sin conocer lo que esto puede provocar a largo plazo en ellos tanto física como emocionalmente.Luego de que el Senador de la República aprobara las reformas que prohíben los castigos corporales en menores y adolescentes, la doctora de la UNAM, Carolina Santillán Torres Torrija, advierte que esta violencia solo los vuelve más agresivos.De la misma forma, la supervisora académica de la estrategia Crisis, Emergencia y Atención al suicidio de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala, declaró que este método de castigo solo produce que los afectados desarrollen conductas delictivas y antisociales, presenten problemas para adaptarse y en algunos casos hasta se produce una enfermedad de salud mental.TE RECOMENDAMOS: Familia acude a sesión de fotos y madrastra pide eliminar con photoshop a su hijastro

Hasta el momento, la doctora explica, que no existe un estudio que demuestre que entre mayo sea el castigo mejores personas se crean.Lo que sí se ha comprobado es que a largo plazo las personas víctimas de violencia física o emocional se vean afectados de manera gradual volviéndose personas agresivas e incluso pueden refugiarse en la comida  y el alcohol.Y es que con este tipo de adicciones buscan llenar ese vacío emocional del que carecen.  Ante esto, la experta indica que la eliminación de estos castigos debe estar acompañada de "tecnología conductual, herramientas y entrenamiento para quienes no tomaron cursos para ser papás, que son la mayoría".