Aunque no queda duda del talento que posee, Cher también se ha destacado por su inigualable belleza a sus 74 años, sin embargo su mamá luce aún más joven a sus 94 años.Georgia Holt, mamá de la cantante, sorprendió a los admiradores de la estrella de la música por lo bien que se conserva pese a su edad. 

Aunque corren versiones de que madre e hija se han sometido a intervenciones estéticas, lo cierto es que ni el bisturí hace milagros si no hay un buen estilo de vida que ayude a conservar esos arreglitos, y la belleza cuesta.La belleza de ambas es inegable y si a eso le sumamos que Cher heredó la esbelta figura de Georgia Holt, podríamos entender más fácil que en esa familia, la suerte llegó en bandeja de plata.