Rayados: la posesión es un ingrediente correcto

Cuando llegó Diego Alonso a Rayados, era casi lógico que iba a intentar implantar un juego con una base importante en la posesión del balón, a mí me parece una clara muestra de intenciones comenzar a jugar con Gallardo y Urretaviscaya, dos extremos que cumplen con cada aspecto para encajar en esa función.Cada que lo intentaba, alguna circunstancia lo hacía dejar un poco guardada esa idea y apelar a utilizar un sistema más práctico ligado a explotar las transiciones. Se lesionó Urreta, hubo una seguidilla de jugadores que eran baja, la defensa andaba mal y tenía que usar línea de 5, debía utilizar mediapuntas por fuera (Pabón y Avilés), hubo varios partidos que tuvo que recurrir al balón parado como principal argumento competitivo. En fin, las cosas no salían como quería.La posesiónAntes de seguir hablando del tema referente a Rayados, hay que definir qué es y qué no es la posesión en el fútbol.No es: No es la única forma de jugar bien, pero sí es la más estética. Hablar de tiki-taka es despectivo, no se trata de pasar el balón solo porque sí El objetivo no es tener mucho tiempo la pelota solo porque sí No se trata de jugar a tener el balón, sino de tener el balón para hacer el juego que quieres proponer No tiene nada que ver con un método perfecto de juego, y si pierdes o batallas para anotar, no hay por qué pensar “no sirve de nada tener tanto la pelota si no haces gol”, porque precisamente las secuencias de pase son para tratar de generar espacios, si falla es lo mismo a que falle un contragolpe. Sí es: Se trata de una parte del modelo y/o plan de juego, no de su totalidad Esta forma es la más adecuada para sostener proyectos y no solo ganar de vez en cuando La intención de los pases es mover rivales. Ejemplo: si la tiene el central derecho, y el delantero rival lo presionó, sabe que el otro central está -probablemente- solo y trata de ir con él, o si lo presiona el extremo izquierdo rival significa que su lateral derecho quedó sin marca y debe ir con él. Sí o sí debes asumir errores que van a parecer ridículos, como un error del central o del contención que cueste una oportunidad clara de gol para el rival, o incluso perder la pelota después de muchos pases y que al rival le quede perfecto para contraataques. El trabajo diarioPara lograr que la posesión cumpla los objetivos de avanzar en bloque, superar al rival entre lineas, eliminar oponentes mediante paredes, agitar al contrincante para generar espacios, dominar salidas de balón creando automatismos no mecanizados, es necesario un trabajo exhaustivo, no es casualidad que Alonso haya reincorporado a Albert Rudé, entrenador formado en la escuela catalana. La base fuerte de esto son los días que no hay partido, ahí deben crearse los comportamientos para avanzar, para identificar cuándo conviene dar 2 pases hacia atrás en vez de uno hacia adelante, la mutación de posiciones durante una jugada, y también qué hacer ante la pérdida según la ubicación del equipo.Diferente forma en números y en estructuraHasta antes de la quinta fecha, Rayados es el club con más posesión, e indudablemente los encuentros ante San Luis, que se replegó desde el primer minuto, y Morelia que perdió un nombre y cedió toda iniciativa, son disparadores para que el promedio de tenencia esté tan elevado, pero lo importante es que el equipo se ha visto ligeramente mejor en comparación a Antonio Mohamed cuando tenía que hacer ataques posicionales.Una de las claves es el cambio de estructura, hemos estado notando que al tener semejante superioridad llega a mutar del 4-2-3-1 base a un 3-4-2-1 o inclusive a un 2-3-3-2 como frente a Morelia, porque ahí sí tenían que estar totalmente ocupando los espacios del campo rival: centrales en medio campo, los laterales a la altura del pivote, un centrocampista subiendo para que los volantes estén a su altura, y el media punta juntándose con el 9 dentro del área.Menos vistoso, pero más útil para el mediano plazoEs un estilo de juego evidentemente menos explosivo que el basado en contraataques, no es lo mismo contar 38 pases desde Barovero hasta Funes Mori que ver a Pabón correr por toda la banda y que el estadio comience a elevar las pulsaciones, pero está comprobado, en el país que me digan, que es la forma en que un club puede sostener un modelo de juego institucional (sub -17, sub -20 y primer equipo), es más sencillo tener la idea de qué tipo de futbolista fichar, te permite identificar más fácilmente cuáles son los errores porque no están solo basados en correr al espacio.Aún no llega a donde debe ¿El desarrollo de Rayados ya es el adecuado? Claro que no, y dudo que encuentre la forma casi perfecta pronto, pero va por el camino correcto, incluso hacen falta fichajes porque Ortíz no tiene suplente y los centrales no tienen la mejor técnica para salir jugando. Cada partido ganando es una bocanada de aire para poder seguir trabajando entre tanta presión, y cada jugada de gol o incluso cada anotación es seguir con la confianza del futbolista de que ese es el camino correcto, porque no hay nada más importante que el jugador esté convencido de que esa es la mejor forma de desarrollar.¿Y los remates?Las secuencias de pase y porcentaje de posesiones ha aumentado, no así el número de oportunidades de gol ni anotaciones, desafortunadamente no ha ido de la mano, esa es la gran responsabilidad que tiene Diego Alonso pendiente.Para lograrlo necesita acostumbrar a los jugadores a atacar en espacios cortos, es decir ante equipos replegados, esto echando mano sobre todo de las paredes y movimientos de atracción, así como secuencias de pase que reúnan a efectivos rivales en el centro del campo para vaciar las bandas, y desde allí tratar de lanzar, o bien encontrar pases entre líneas de Carlos Rodríguez hacia los atacantes.La expectativaSi usted quiere que las cosas sean inmediatas, perfectas, ganen títulos y además salga plenamente satisfecho y lleno de diversión después de cada partido, permítame que le diga algo: no va a suceder, no se haga esa idea, porque no es la expectativa correcta, sino la ideal, y en el fútbol debes tratar de no confiar en lo que más te gusta, sino en lo que se está trabajando, e insisto: el cuerpo técnico de Diego Alonso va por el camino correcto para sostenerse en el tiempo, no ser solo un equipo de uno o dos torneos y caer de nuevo.