Los aficionados del River Plate calentaron el ambiente previo a la Final de la Copa Libertadores que disputará su equipo contra el Boca Juniors en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid, con pólvora de fuegos artificiales y ruido de cánticos y tambores en el hotel de concentración de su equipo. Convocados a las 12 del mediodía para un nuevo 'banderazo', esa exhibición de banderas y camisetas del equipo típica de los equipos argentinos y que ha conocido Madrid, ya en varias ocasiones durante estos días previos a la llamada 'superfinal', los aficionados del conjunto blanco y rojo se hicieron notar poco a poco.Si al mediodía eran apenas unas decenas los que comenzaban a desplegar sus banderas en torno a las vallas que protegen la salida del hotel Eurostars Madrid Tower que acoge al conjunto dirigido por Marcelo Gallardo, el goteo fue constante hasta la una de la tarde, cuando ya fueron dos centenares en los alrededores del hotel, custodiado por un amplio dispositivo de la Policía Nacional.Fue a partir de las 13.00 horas, tiempo de España, cuando apareció el contingente principal de hinchas 'Millonarios', que convocados por las 'filiales' o peñas internacionales en Madrid y Barcelona, acudieron caminando desde la Plaza de Castilla con dos banderas de varios metros: una albiceleste argentina y otra blanca con una franja central roja de River Plate. Se produjo entonces el gran estallido de pasión 'millonaria' con cánticos de victoria, exaltación del 'gallinero' y los 'huevos millonarios' (a los hinchas de River se les conoce como 'gallinas'), y también algunos otros de desprecio hacia la afición 'bostera', uno de los nombres que reciben los apasionados de Boca Juniors. Un estallido también literal, ya que a las banderolas les acompañaron fuegos artificiales de color rojo prendidos justo delante de la imponente torre del Eurostars Madrid Tower, de 236 metros, el tercer rascacielos más alto de España y séptimo de Europa. Entre los aficionados del River Plate, muchos aficionados disponían ya de su billete electrónico, pero también algunos tenían el billete en papel y la pulsera que les permite entrar a la zona de seguridad delimitada, que tenían que recoger en la zona de la glorieta de Cuzco, donde la organización había dispuesto el punto de recogida para los socios del equipo del barrio porteño de Núñez. Este era el caso de la familia Cambiasso, cinco miembros todos con su entrada que en conversación con EFE explicaron que se habían dividido para viajar a España, unos llegados el viernes y otros aterrizados en Madrid esta misma mañana, en el último vuelo transoceánico a tiempo para la 'superfinal'. "Este clásico debía haberse jugado en el Monumental, pero nos haremos locales en el Bernabéu", manifestaron a EFE los miembros de esta familia, en nada relacionada con el ex jugador de River, Real Madrid o Inter de Milán, Esteban Cambiasso. "Somos la parte 'laburadora' (trabajadora) de la familia", bromearon. Los futbolistas de la plantilla de River Plate salieron por la puerta principal del hotel para ver a sus hinchas cantar tras las vallas y con la atenta mirada de la policía, y dedicaron unos aplausos a su hinchada, que volvió a lanzar fuegos artificiales. Con su ánimo, sus banderas y su ruido, los aficionados 'millonarios' comenzaron a organizarse para partir en procesión hacia el estadio Santiago Bernabéu.