Mi intención al evaluar el tercer interinato de Ferretti con México no es exponer números, sino tratar de entender los motivos de por qué le fue tan mal.Después de tanto estira y afloja, Tigres apretó más y evitó que Tuca fuera el director técnico elegido para el proyecto de Qatar 2022, cuando el bigotón se veía ilusionado, hasta había mencionado que iría a los clubes cada semana para ver cómo entrenan los jugadores y no necesariamente cómo juegan, tenía ideas que no podrán ser concretadas.Ferretti fue parte de un manoseo público entre si se iba o se quedaba, tuvo que haberse estresado y fastidiado por semejante situación, y llega el punto de definir algo: ¿culpable o víctima de este mal semestre que tuvo México?Las convocatoriasMiguel Herrera declaró que las listas de seleccionados no eran hechas por Ferretti, sino que alguien más se las hacía. Ese fue un muy mal movimiento entre compañeros de profesión y estoy totalmente en contra de que esto suceda, pero vamos: yo también pienso que había muchas sugerencias respecto a quién llamar.Las siguientes palabras son en el terreno de la suposición, porque quiero pensar que en alguna reunión entre Ferretti - directivos, se llegó al acuerdo de que estos partidos serían para ver a algunos jóvenes que hayan destacado en la primer parte del 2018 y en lo que va de esta segunda mitad, y así el próximo seleccionador tendría oportunidad de tenerlos identificados para futuras convocatorias.¿No jugaban a nada?Entre esos grupos de jugadores desconocidos, había que encontrar una manera de que pudieran cohabitar dentro de la cancha, y la forma más sencilla siempre será la posesión del balón. Ferretti intentó trabajar sobre eso la mayoría de los partidos, pero competitivamente prácticamente siempre se quedó varios pasos atrás que sus rivales.No poder contar con futbolistas clave terminó por costar mucho, ya sea porque no fueron convocados o porque decidían irse antes a sus equipos europeos, pero sin duda esto mermó las posibilidades del Tuca.Una imagen reconocida y manchadaLa Federación Mexicana de Fútbol tenía que poner una cara en la silla más grande del fútbol en nuestro país, le tocó ser a Ferretti y no se sabía que tan sucio iba a salir de allí, y puedo decir que sí debe traer algunas manchas: descuidó su trabajo en San Nicolás por ir a una selección que da pena, que no se nota su mano y que fue parte de dimes y dirites durante semanas o meses.Más allá de los jugadores, directivos y selección en general, Tuca es quien sale peor de este breve ciclo. Como él dijo: satisfecho, pero no contento. No cabe duda que trabajó, pero también debió encontrarse con muchas trabas que no lo dejaban en paz, porque en su equipo no las tiene.A lo que sigueFerretti cumplió su parte del acuerdo, ahora le tocará a la federación continuar con la suya: asegurar que este proceso de prueba haya sido realmente valioso y no solo una pérdida de tiempo. Gerardo Martino en algún momento hablará con Ferretti y el brasileño le dirá todas las verdades que se viven en selección, saber que ante los resultados aunque seas víctima siempre te querrán poner de victimario.